MURIENDO DE HAMBRE
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Tu dieta te hace sentir vacio y no entiendes por qué? Por aquí vamos a dejarte dos razones muy comunes por las que eso pasa.
En otros post expondremos más motivos para que estés pendiente de corregir.
1 - Cardio de baja intensidad excesivo
Una gran cantidad de estudios en los años recientes han sugerido que el ejercicio cardiovascular es una manera efectiva de suprimir y manejar el hambre. Pero si permaneces pegado a las caminadoras o elípticas durante horas haciendo ejercicio con intensidad baja a moderada, el efecto es completamente contrario, podrás sentir como incrementa tu apetito!
Un estudio realizado con Ciclistas alemanes encontró que la producción de la hormona que estimula el apetito Grelina, aumento significativamente después de 120 minutos de ejercicio cardiovascular con intensidad baja a moderada, sin embargo se comprobó que no ocurre lo mismo con el ejercicio de alta intensidad, independientemente de su duración.
2 - Falta de sueño
No es secreto que la privación del sueño puede dañar tu rendimiento en los entrenamientos y hacer que tu recuperación sea bastante miserable, como si fuera poco podría también influenciar que tan fiel te mantienes a tu dieta.
Un estudio publicado en "the Journal of Sleep Research" encontró que una sola noche de privación del sueño causaba que en los sujetos de prueba los niveles de apetito y de la hormona que lo estimula (Grelina) incrementaran drásticamente. Otros estudios encontraron resultados similares para sujetos que durmieron mal durante varias noches.
Estos estudios sugieren una relación bastante simple: Entre menos duermes, más riesgo tienes de tener hambre incontrolable. Además, no necesitas ser un experto para saber que si has tenido una mala noche va a ser difícil mantenerte positivo y conservar la dieta.
Parte II
Born, J. et al. (2008). A single night of sleep deprivation increases ghrelin levels and feelings of hunger in normal-weight healthy men.
Erdmann, J., et al. (2007) Plasma ghrelin levels during exercise: effects of intensity and duration.
King, JA, et al. (2011). The acute effects of swimming on appetite control.